1.12.06

Algunas razones para convertirse en vegetariano


Siempre me han encantado las verduras y hortalizas y de hecho, componen uno de los grupos de alimentos de los que básicamente me nutro habitualmente. Sin embargo núnca me he dedicado a estudiar el equilibrio que puede causar el hecho de mantener una alimentación sana a base de verduras y proteínas derivadas de soja. Personajes como Platón, Einstein, Voltaire, la Reina Sofía, Paul McCartney o Brad Pitt son sólo algunos ejemplos que se encuentran entre los declarados vegetarianos o veganos. Pero en realidad, hoy en día, un porcentaje de la población mundial muy alto dice seguir una beneficiosa dieta de alimentos vegetales.
La palabra vegetariano deriva del latín vegetus, que significa 'completo, sano, fresco o enérgico'. En España, cada vez existen más personas que se decantan por el vegetarianismo. Unos lo hacen para perder peso, otras por razones de ideología y otras para reducir el riesgo de padecer determinadas patologías como son el cáncer, enfermedades cardiovasculares, diabetes u obesidad. El vegetarianismo incluye también al veganismo y se define como la práctica de no comer carne, pollo, pescado y sus productos derivados, aunque puede o no, incluir el consumo de huevos o productos lácteos. Mi idea perfecta sería aquella de alimentarme a base de las proteínas provenientes de la soja (tofú y seitán), complementar las comidas con la proteína proveniente de huevos y de vez en cuando permitirme el deleite de comer un buen pescadito. Aquel que es vegetariano, reduce el riesgo de contraer ciertas enfermedades al aumentar su consumo de granos integrales, legumbres, oleaginosas, frutas frescas y secas y vegetales. De hecho, en un país como el nuestro se encuentra por suerte que por lo general, las frutas, vegetales, granos, legumbres y nueces cuestan menos que la carne. De hecho, los alimentos de origen vegetal usan menos recursos naturales del medio ambiente. También existe una significativa correlación entre el consumo frecuente y duradero de alimentos de origen animal altos en grasa y colesterol y la incidencia de enfermedades del corazón, ciertos tipos de cáncer, ataques apopléjicos y diabetes. Para empezar siendo vegetariana, debiera emezar sustituiyrendo progresivamente a lo largo de la semana los platos con carnes por otros vegetarianos. De hecho, la carne se puede cambiar por hamburguesas vegetarianas, por ejemplo (como el seitán o el gluten de trigo).